Fin de semana en Cusco en tres pasos

¡Perdón! Sé que he estado desconectada un par de semanas pero prometo compensarlo y ponerme al día con todo. Tengo varios post pendientes que quiero compartir con ustedes.

Así que sin más, aquí va el primero: hace un par de fines de semana fui a Cusco con mis amigas de la Universidad. El primer viaje que hicimos juntas fue a los 18 años, cuando todavía estábamos en Estudios Generales, por lo que ha pasado bastante tiempo y la dinámica era otra. El enfoque ha cambiado dramáticamente de discotecas a restaurantes. Y de eso se trata este post: los lugares a los que tienen que ir sí o sí para comer delicioso durante un fin de semana en Cusco en tres pasos.


Delicioso piqueo de quesos en el Museo del Café

El primer destino fue La Cantina. Para mí, el vino es felicidad. Si ustedes piensan como yo, tienen que ir. Pero como este post se trata de comida, quiero agregar que también van a encontrar pizzas deliciosas y de masa delgada, embutidos y queso. El ambiente es tranquilo y la atención es estupenda. Hasta tuvimos limoncello de cortesía. 

Tienen solo vinos italianos, una gran selección de embutidos y quesos y además, todo acompañado de tostadas con finas hierbas y aceite de oliva macerado con rocoto. Es una maravilla de lugar y el precio me parece bastante accesible. Eso sí, si van por el piqueo de embutidos y queso, sugiero que sea para un aproximado de cuatro personas porque las cantidades son absolutamente generosas. Cuesta S/. 70 soles. Este lugar es para regresar una y mil veces.


Tostadas, finas hierbas, aceite de oliva y miel

Este aceite de oliva merece un premio


Siguiente parada: la Quinta Eulalia. Esta elección es muy distinta a la anterior. Mientras que La Cantina es un huequito italiano en medio de Cusco, la Quinta Eulalia es un pedacito de historia típica. Esta es la quinta más antigua que todavía existe en la ciudad, donde pueden probar los platos tradicionales, el local es encantador y el precio es de locos. En mi opinión, Cusco cuenta con opciones gastronómicas bastante cosmopolitas pero lo importante es conocer la ciudad desde su cultura culinaria. Nosotras éramos tres personas, pedimos un plato de chicharrón, otro de trucha y un choclo con queso, lo que nos salió aproximadamente S/. 61 soles. Y además, por favor, ¡el tamaño de ese choclo! Los colores de los platos, su frescura... muy recomendado.

La Quinta <3

Choclito, habas, cebolla y menta

Trucha protagonista

Colores

Chicharrón

Tercera parada: Lonche / desayuno (cualquier día menos domingo) en el Museo del Café. Un lugar para relajarse, pedir unos desayunos gigantes (tienen variadas opciones), tomar el mejor café de la ciudad, u optar por tomar lonche y pedir el piqueo de quesos que pueden ver al inicio de este post. Además, cuenta con un museo muy simpático que cuenta todo el proceso de cultivo y producción del café. 10 puntos.


Bonus track: Jack's cafe. ¿Por qué de Bonus Track? Porque creo que la mayoría de personas que visitan Cusco saben que tienen que visitar Jack's café para tomar un desayuno contundente. Nosotras fuimos a comer Nachos. Sé lo sui generis que suena eso pero una amiga estaba antojada de Nachos desde hacía dos viajes a Cusco así que era casi una obligación. Para sentir que tomábamos desayuno, además del café y del té de kión, pedimos tostadas francesas. Un exceso feliz.

Tostadas francesas, para sentir que era desayuno

Los famosos nachos

Bueno, esas son mis recomendaciones, lugares que descubrí en este viaje y que me parecen, aportan de manera distinta para comer increíble. Si llegan a visitar alguno, cuéntenme cómo les va :)










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